Transcripción Resumida
de EXPOSICIÓN DE
PATRICIA DEL
CARMEN MARDONES M.[1]
“NUESTRA LITERATURA REGIONAL: LITERATURA
DE
TODO MOMENTO.”:
(Apuntes sobre la
literatura en Arica al finalizar el siglo XX)
Primero
dejar en claro que no creo deba existir una clasificación taxonómica de los
escritores por territorio, ni por edades, ni por generaciones u otras. Las
clasificaciones sirven para identificar algunas tendencias solamente,
inclinaciones de una mayoría de habitantes como mores y costumbres que se toman
como algo importante. Ahora, para ser escritor hay que tener un manejo
lingüístico, hay que estudiar el lenguaje a fondo, en sus instancias tanto
formales académicas, como procedimentales, y para transformar el lenguaje en
literatura también hay acciones procedimentales conceptuales que van a fundamentar
esa situación. Sin embargo detrás de todo libro o escrito, de todo escritor,
hay un ser un humano. Un ser humano único, que tiene una historia personal diferente
a los demás. Inclinaciones, en que prevalecen en su conducta aspectos que se
refieren a territorialidad, comunicación, distancias de fuga, etc. Eso implica
que cada vez que una persona escriba tiene como misión enviar un mensaje para
que el otro lea y existirán tantos mensajes como personas los emitan.
Toda
comunicación es apelativa es decir, el autor me indica qué debo hacer y si no
tengo experiencias diferentes, qué haré, qué asimilare y cómo descifraré lo que
me dice el texto.
Existen
dos tipos de literatura: la literatura de momento y la literatura de todo
momento. La literatura de todo momento que sobrevive al tiempo y al espacio la
conocemos. (“Allá en el ciber de la esquina…” lee texto “Continúe?” de R
Contreras) Es precioso lo que escribe en este libro, en un código diferente al
que a nosotros nos identifica, pero es un código real, existente, diferente al
nuestro. Ellos, estos jóvenes tienen estas experiencias. ¿Estamos todos
preparados para enfrentar estos códigos? ¿Para decodificar estos códigos o para
enfrentarlos? Frente a ellos debemos, ser más tolerantes porque a ellos les
falta tiempo, tenemos que esperarlos para que se preparen más también para
entendernos a nosotros.
La
experiencia es la parte ética de la literatura, -y si voy a educar - este es un aspecto importante de la
literatura, y la vida me ha tratado bien, no podría como escritor tratar
situaciones violentas como matar un perro, cómo prostituirse. Imposible. La
gente de todas las edades está esperando cosas que las enaltezcan. Este niño
que está representado acá (en “Continúe?”) no digo que sea el autor, no, digo
el hablante lírico, es un personaje no de ficción que existe por millones de
millones, que va al colegio no a estudiar,
va a comer, va buscar unas zapatillas que le da el colegio, y cuando ya
comió vuelve a donde alguien que lo cuida, que puede ser cualquiera, no el
padre ni la madre generalmente.
Y
sobre esto de las generaciones, ya lo decía,
no creo en eso de la tercera edad, creo sí que existen tres edades: cronológica,
mental y visceral. Dejemos de lado eso de edades, de generaciones, y veamos la
edad mental que es con la que escribimos y dicho esto revisemos algunos
importantes escritores ariqueños, por ejemplo Ariel Santibáñez que tiene una poesía sencilla, plena de
observaciones y respeto por las personas. A Raquel Pino que dedicó toda su vida a trabajar en la literatura, a
publicar, escribió mucho, fue muy leída, hizo negocios con el ejército, con las
FFAA y la leyeron más que a todos los que estamos acá. Otro es Ernesto Murillo, que en los años 30, es
capaz de describir una situación como la que hoy vivimos, la falta de respeto
por el ecosistema, escritos sencillos sobre contaminación: cómo viven
animalitos, puede ser altamente educativo. Mayo
Muñoz reconocido por una literatura muy política, (sí, todos tenemos ideas
políticas, pero también está en su poesía lo simple, el ser todos iguales).
Mayo Muñoz no se queja, no llora. La actitud mental de él es destacable ojalá
todos tuviéramos una actitud como la de él. Juan Mezquida Bueno, académico, poeta que describe a la sociedad
sin mayor violencia, con elegancia, con mucha elegancia, enfrenta temas
universales como el amor, la muerte, la igualdad, la solidaridad. Y José Martínez Fernández, siempre tan
crítico y criticado, la poesía tiene que ser auténtica, tiene que ser de una
verdadera identidad, no de falsa identidad y acá tenemos un ejemplo de una
verdadera identidad. Carlos Amador
Marchant. No hay una violencia explicita en su obra, describe algo brutal
de manera muy sutil. Y Pedro Pablo
Humire y Nana Gutiérrez con una
precisión lingüística única, una poeta a celebrar, en ella hay que admirar y
aprender de su forma y concepto, de su manejo del idioma. Nana no necesita
metáforas para escribir pues usa el lenguaje en toda su fuerza. (Su hijo
Claudio Solari Gutiérrez vive hoy en Arica
y tiene una página web de su madre). Pedro Humire capta la profundidad
de la cultura aimara con explicaciones líricas de comportamientos personales y
sociales de esa cultura. También Alicia
Galaz una persona bastante distante, distinta, tenía una capacidad para
analizar a la mujer y casi toda su obra tiene que ver con ello. Alicia parte
haciendo trabajos académicos, luego pasó al ensayo y finalmente a la poesía,
quizás no es para todo lector, quizás para quienes vivieron su época. Claudio Castro: palabras sencillas, sin
ningún aspaviento, humilde en su persona y en su lenguaje, de una fuerte
emocionalidad, no es la violencia, ni la protesta así es su literatura.
Y
a mí me interesa cómo ingresa esto en la mente del niño, la información, qué
pasa en el cerebro cuando somos estimulados por emociones positivas, o por
emociones negativas. A todo escritor le debe interesar esto. Cuando yo le
cuento a un niño como se le cortó el cuello a una llama en un ritual sangriento
para que me vaya bien en el próximo año, el tema tiene que ver con la parte
valórica. La idea del bien y del mal es parte de nuestro subconsciente.
Y
ya finalizando, José Morales un gran
maestro, de un uso lingüístico muy clásico, cuida lo formal, pero no es
rebuscado y su tema está ligado al paisaje de Parinacota y la pampa salitrera.
Luis Araya Novoa de un nivel
nacional e internacional de una visión cósmica y un sentido de unidad básica de
familia en un ambiente en que la naturaleza concita lo que él deja de
manifiesto en su obra.
Pero
no sólo los nombrados, sino también debe mencionarse a importantes escritores
como Ingrid Guillén, María Ester Laborie, Manuel Lagos del Solar, Pedro
Lagunas, Rita Mardones, Patricio Quioza, Yasuko Notoy, Rodolfo Khan, Julio
Opazo, Danitza Peñaranda, Walter Rojas, Eduardo Salas, Abraham Seguel, Clara
Seura, Peter Woodbridge, Eva Águila, José Coloma, Antonnieta Dall Ósso, Priscilla Marinkovic, Oscar Arancibia, Jorge Bellet, Iris
Fernández, Nelson Gómez, Félix Milanés, Oliver Welden, Juan de la Cruz
Espíndola, Jaime Moya, José Coloma, Florencio Faúndez, Claudio Huerta, Ramón
Seguel, Luis Seguel, Patricio Barrios, Gastón Herrera, Rodolfo Herrera, Luis
Toro, Ana Alday, Ana Labbé, Bellamín Silva, Kathia Tapia, Carlos Morales,
Patricio Barrios, Roberto Flores, Rolando Martínez, Erna Aros, Vanessa
Martínez, Andrés Oyarzo, Margarita
Aguilar, Margarita Figueroa, Gabriel Ahumada, Juan Carlos Mamani, Rosa
Flores, Alfredo Guerrero, Lily
Fernández, Boris Correa, Carlos Massa, Elena Márquez, Myrta Ramírez, Silvia
Córdova y a los destacados Manuel García, Premio Nacional de Música y Oscar
Hahn, Premio Nacional de Literatura.
Dejo
para mis últimas líneas mis escritos: todos pensados en un equilibrio universal
expresado en todas las circunstancias vitales como uno más de los seres
existentes.
Gracias.
Comentarios: Se hace
mención que Manuel García, cantautor, comenzó en el Taller Altamarea de Arica,
[1]
Patricia
Mardones Mardones; Profesora de Estado, Administradora Educacional,
Investigadora Social, Magíster en Gestión de Calidad, Escritora